Los planes de futuro para los motores a partir de 2021 que propone, de momento, Liberty Media no ha sentado nadie bien a Ferrari, Renault y Mercedes y los italianos son los más beligerantes.
En principio, Renault y Mercedes se posicionaron en contra de las nuevas reglas para rebajar los costes y aumentar el ruido. Y para ello quiere imponer una serie de piezas estamdar y la reducción de la complejidad electrónica de los actuales motores.
Por parte de estos dos fabricantes de motores, exponen que el coste aumentará con la nueva reglamentación, ya que habrá que trabajar desde muy abajo en los motores y que los chasis también hay que adecuarlos con el consiguiente encarecimiento. Argumentan, además, que ellos son fabricantes de motores y que no aceptarán piezas estamdar obligatorias.
Pero el que con más fuerza ha hablado ha sido Marchione, máximo dirigente de Ferrari con un enfado notable. Entre otras cosas ha dicho:
"Liberty tiene varias buenas intenciones en todo esto, una de ellas es reducir el coste de funcionamiento de los equipos, lo cual creo es bueno".
"Pero hay un par de cosas en las que no estamos de acuerdo. Una de ellas es el hecho que, de alguna manera, la singularidad del tren motriz no será un elemento diferenciador en la parrilla. No toleraría eso para el futuro".
"El hecho que por ahora no estamos de acuerdo en la estrategia a seguir y que vemos que la categoría está dirigiéndose a un rumbo distinto en 2021, obligaría a Ferrari a tomar decisiones".
"Entiendo que Liberty ha tenido esto en cuenta al dar su punto de vista, pero creo que debe estar totalmente claro que, a menos que veamos que lo que se decida es beneficioso para el mantenimiento de la marca y su mercado y fortalecer la posición única de Ferrari, Ferrari no jugará".
"No quiero prejuzgar nada de esto. Pero llegaremos a la reunión el martes con las mejores intenciones y veremos a dónde nos lleva".
"Lo que sí sé es que la F1 es parte de nuestro ADN desde el día en que nacimos. No podemos definirnos a nosotros mismos de manera diferente".
"Pero si cambiamos todo hasta el punto en el que se vuelva irreconocible, no querremos jugar más. No quiero estar en una especie de NASCAR global, simplemente no quiero".
Terminó diciendo que no le importaba ser el Presidente de Ferrari que sacará a la marca de la Förmula 1 después de 40 años en la máxima especialidad.
Este próximo martes habrá una nueva reunión del Grupo de Estrategia que se prevé muy caliente.
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