Por la participación de Fernando Alonso en la edición de este año, todos los medios de comunicación se han volcado en esta carrera. Pero, para entenderla bien, hay que profundizar un poco más.
Ya sabemos que no es una carrera al uso, ya que el circuito es un óvalo y ello requiere una configuración totalmente diferente del monoplaza. Pero de esto, la asimetría del coche, ya se han ocupado muchos y, sobre todos, el propio Alonso.
En Indianápolis lo más importante es la velocidad. Son casi tres horas a más de 300 kms con lo que esto conlleva.
Lo primero que queremos resaltar es el combustible que se utiliza, algo de lo que poco se ha hablado. La mezcla es de 85% de etanol y 15% de gasolina. Y esto tiene una explicación, o dos.
En primer lugar nos referiremos a la anecdótica. El alcohol fue una imposición de las autoridades que querían potenciar este elemento, porque era bueno para economía americana y primaba todas las plantaciones de caña de azúcar que había, subvencionadas por el gobierno. Y esto es así desde el principio y continúa todavía.
Por la parte técnica hay que hacer hincapié, que la mezcla con la gasolina consigue una mejora importante en la combustión. La gasolina utilizada es de 115 octanos, superior a la utilizada en F1. En su contra hay que decir que es un combustible extremadamente volátil y, en el caso de un escape y posterior incendio, la llama es, prácticamente, invisible.
Como decimos, para los motores biturbo atmosféricos, es mejor esta mezcla que si sólo fuera de gasolina porque admite un mayor relación de compresión y una presión de soplado aumentada.
Y otro aspecto muy importante, del que poco se ha hablado, es la estrategia que hay que seguir durante la carrera.
Como dice con mucho conocimiento de causa Roberto Hernández, Las primeras 150 vueltas no son muy importantes. No debemos asustarnos si Fernando Alonso no va en cabeza durante estos giros.
Los primeros gastan más combustible y fuerzan más el motor que los siguientes, si estos consiguen ir al “rebufo” de ellos. Y conservar combustible y hacer menos pit stop es lo más importante en esta prueba.
Y fundamental es el último pit stop. El que lo haga el último, yendo, por supuesto, en las primeras posiciones, tendrá una gran ventaja. Podrá llenar el depósito con los litros imprescindibles y poner neumáticos nuevos.
Y esto le puede dar la victoria.
Atención, por lo tanto, a las paradas. Entre otras cosas, son un espectàculo en si mismas.
Motorpoint va a dar la carrera en directo. Atentos a nuestra web, en donde podeis encontrar los enlaces de los entrenamientos libres del sábado y de la carrera el domingo, que comienza a las 18,20 hora de nuestro país.
Y por la importancia que tienen, os damos la conversiones de millas y galones, que son las medidas de la Indy para los que no lo sepan y no tengan que buscarlo.
1 Milla es igual a 1,60934 kilómetros.
1 galón son 3,78541 litros.
Si (
No(
