El día comenzó de forma espectacular para una pareja que comenzaba su matrimonio. Tras la ceremonia se despidieron de sus invitados conduciendo un impresionante Ferrari 458 Spider de color blanco. Ahora bien, la jornada continuó con normalidad hasta el día siguiente.
El novio alquiló un Ferrari 458 Spider para hacer las veces de coche nupcial, y probablemente dándose el capricho de ser un afortunado conductor durante un fin de semana. Para ello depositó una cantidad de unos 6.500 euros y así contar con los servicios del flamante deportivo.
El individuo de 25 años de edad accidentó el deportivo italiano al día siguiente cuando el pie del conductor se topó con la alfombrilla del coche y piso el acelerador en lugar del freno, estrellándose, como se observa en las imágenes, contra el muro de un bloque de viviendas situado en las inmediaciones de la calzada. Los ocupantes del vehículo, los novios, resultaron ilesos, aunque se enfrentan a la imposición de unos 46.000 euros por culpa de los desperfectos en el vehículo.
Sin duda, esta pareja tendrá siempre una anécdota que contar el día posterior a la unión de su matrimonio.
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