¡Son las carreras!

Se habló que debía suspenderse la carrera. Al menos la de Moto2, dónde participaba Luis. Al final se ha tomado la solución adecuada: reformar el trazado de la curva doce y trece. Esta última, fue donde tuvo lugar la tragedia.
Los pilotos de F-1 lo habían advertido. Por eso modificaron el trazado para reducir la peligrosidad de estas dos curvas. Demasiado tarde ha llegado el cambio. Basta que ocurra un hecho tan lamentable para intentar remediarlo.
Me decían algunos de los pilotos que la organización lo había propuesto; es decir, hacer el mismo trazado que en la F-1, pero otros pilotos estaban de acuerdo en mantener el de la motos, mucho más espectacular, divertido, pero... ¡Mortal! Son las carreras.
Me encuentro a la mujer de Criville en la sala de Prensa. Estaba triste. "Fíjate -me dice- estábamos celebrando el premio que le han dado a "Criville", ya forma parte de las "Leyendas del motociclismo", y después nos enteramos de lo que le ha sucedido a Luis" Estaba consternada, indignada. Son las carreras.
Los que hemos vivido situaciones similares estábamos más tranquilos. Es un deporte de riesgo y como tan, tienen estas consecuencias ibas. Bien es cierto que se ha ganado en seguridad. Mucho, además. Pero la tecnología está haciendo que las motos sean más potentes y rápidas, se ha ganado en estabilidad hasta límites impensables hace solo unos lustros. Unos neumáticos con diferentes c impuestos y texturas. Todo ellos permite a los pilotos a tomar más riesgos de lo debido. ¡Qué diferencia!
Hace año el riesgo era mucho mayor. Circuitos sin escapatorias, motores que se gritaban cuando se iba a velocidades escalofriantes, neumáticos que se utilizaban media temporada -salvo excepciones-, cambios que dejaban la moto seca. Ahora el nivel de accidentes, afortunadamente, se ha reducido notablemente. Ya no es lo que era.
Por este motivo, una tragedia como la sucedía en este circuito es sorprendente. No se esperaba. Un piloto español, de Mallorca, un chico amigo de sus amigos, buena persona, nos ha dejado. ¿Culpa de quién? Son las carreras.