Dos líderes se enfrentan con sus segundas y correspondientes generaciones. Por un lado, se encuentra el Ford Kuga, cuya renovación tuvo lugar a finales del pasado año 2013, convirtiéndose en uno de los referentes del segmento dadas sus buenas y generosas dimensiones, así como un equipamiento tecnológico a la altura de las grandes berlinas de representación del mercado.
En el lado opuesto del “ring”, se encuentra el Nissan Qashqai, cuya aparición en nuestro mercado ha fructificado recientemente. El crossover nipón sabe lo que es liderar su segmento, pues ha sido uno de los vehículos más vendidos en España durante varios años. Ahora busca revalidar título. Para ello, argumentos no le faltan, pues ha mejorado la calidad de muchos materiales, ha aumentado su atractivo y, por supuesto, ha ganado en cuanto a comportamiento general se refiere.
FORD KUGA
Lo más destacado en el vehículo americano es su magnífico comportamiento en carretera. Resulta muy eficaz y cómodo para viajar. Además, con el propulsor diésel de 140 CV se consiguen unos resultados muy económicos de consumo, sin llegar a superar durante la prueba los 7 litros/100 km.
A todo esto se une el equipamiento, cuyo nivel es muy elevado y bastante avanzado. Muestra de ello es el sistema de apertura del maletero, pues el usuario solo deberá pasar el pie por debajo del paragolpes para abrir y cerrar el portón posterior.
Datos técnicos
Opinión: Ha mejorado bastante sufriendo un salto cualitativo perceptible a primera vista. Su diseño también ha ganado enteros. El interior continúa siendo algo sobrio.
Veredicto: Fántastico y exitoso diseño, al igual que el rendimiento de las motorizaciones diésel. Ahora bien, continúa siendo algo sobrio en el habitáculo interior y, su comportamiento off-road, no es de lo mejor del mercado.
Precio: 24.850€
Prueba realizada por: Tomás Díaz-Valdés JR y Julián S. Humanes