En un circuito de las características de Hungaroring, puede haber sorpresas. La potencia de los motores Mercedes aquí pierden parte de su eficacia y la aerodinámica es la que toma protagonismo.
Pirelli sigue con su decisión conservadora y los neumáticos que ha traído no permiten ninguna estrategia extraña. Habrá una sola parada, ya que los más blandos van a aguantar muchas vueltas. Por otra parte, ha dado la impresión que a todos los monoplazas les costaba calentarlos.
Ferrari, antes de estos Libres, parecía el equipo a batir. Sin embargo, no parece, después de hoy, que lo vayan a tener claro. Tienen, tal vez, el mejor ritmo de carrera, pero no se les ve capaces de conseguir la pole. Y adelantar en este dircuito es, prácticamente, imposible.
Los que están muy fuertes aquí son los Red Bull, al menos Ricciardo. Hamilton no quiso realizar una vuelta rápida y se paso la tarde rodando con los neumáticos blandos y nunca montó los superblandos. Pensó más en la carrera que en la pole y, a pesar de ello, sigue siendo el máximo favorito para liderar la parrilla.
McLaren y Toro Rosso parecen dispuestos a pelear por entrar en Q3, sobre todo nuestros pilotos Alonso y Sainz. Fernando ya aventuraba que podía estar el 7º o el 8º y así quedó por la mañana y por la tarde. Como decimos, en este circuito los caballos de más se notan menos y los monoplazas ingleses e italianos tienen un corpotamiento muy bueno.
En cambio Williams y Force India, ambos con motor Mercedes, no parecen estar muy a gusto en Hungría. Renault, sólo con Hulkemberg, también se prepara para estar entre los diez mejores.