Seat 124 Sport cumple 50 años

La primera serie, que montaba la mecánica 1600 del Fiat 125 (de 110 CV amén de un aumento de compresión), se comercializó hasta 1972. Alrededor de 10.000 unidades salieron de la cadena de montaje de la marca en Barcelona; cada una de ellas se diferenciaban de su predecesor, el 124 Sport 1800, aparte de por su motor, principalmente por un frontal y una trasera distintas.

La prensa española lo bendijo como 'depotivo de lujo', aunque normalmente acabase en manos de burgueses de mediana edad. No olvidemos que el coupé definitivo costaba el equivalente a 4 600. ¿Lo valía? Es posible que no del todo, dados sus deficientes
acabados. O igual sí, si tenemos en cuenta su preciosa línea, su propulsor con doble árbol de levas en cabeza y su novísima caja de cambios de 5 velocidades. En su momento fue muy criticado también por el eje rígido trasero, por su dirección de tornillo, o por sus escasos frenos, aunque fueran de disco a las cuatro ruedas.

Rizando el rizo: Seat 124 Sport 1800

En 1972 llegó la segunda serie, el 124 Sport 1800. Además de los cambios estéticos que hemos mencionado más arriba, la principal novedad estaba bajo el capó. Y es que equipaba el proverbial motor del Fiat 132, gracias al cual nuestro querido coupé ganaba en practicidad aunque perdiera un poco de la deportividad con la que tan mediaticamente se lo había bendecido.

Tras 15.000 unidades fabricadas, la producción del 1800 cesó en1975. Los 124 Sport fueron sin duda protagonistas de la historia de Seat, ya que abrieron el camino a la fabricación de automóviles prestacionales que podían medirse con los que se comercializaban en el resto de Europa Occidental. Un coupé de carácter deportivo capaz de plantar cara en bastantes aspectos a, por ejemplo, las poderosas Lancia Fulvia e, incluso, al Porsche 914.