GP de Mónaco

El piloto monegasco Charles Leclerc ha conseguido la pole en el Gran Premio de Mónaco, sexta cita del Mundial de Fórmula 1, mientras que el madrileño Carlos Sainz saldrá segundo a pesar de su accidente final con el mexicano Sergio Pérez, con Fernando Alonso, que también se fue contra las protecciones en su último intento, partiendo séptimo.

Practicamente todos los pilotos fueron incapaces de adelantar a los monoplazas que tenían delante y nadie acabó contento.

Una carrera aburrida con la única duda de si Daniel Ricciardo iba a ser capaz de terminar con un motor dañado desde las primeras vueltas.

El dominio de Ricciardo durante todo el fin de semana ha sido impresionante. Nadie se le acercado en todo el fin de semana,salvo su compañero Max Verstappen.

Mercedes y Ferrari son los favoritos en general, pero en circuitos como Mónaco, Hungría o Singapur, Red Bull explota todo su potencial de chasis y aerodinámica.

El GP de Mónaco es especial en todo. Incluso en los días en los que se celebra el GP. La actividad comienza el jueves, ya que, como es tradicional en el Principado, el viernes no se rueda.

Vettel se impuso por decisión de su equipo. Raikkonen no tenía ritmo y el equipo se decidió por el alemán. Ricciardo, muy bueno siempre en este circuito, se aprovecha también de la estrategia y entra tercero.

Hamilton no se hace con su monoplaza durante el fín de semana más glamuroso de la temporada y no logra pasar a la Q3. Sí lo hace Bottas y clasifica a milésimas de los dos Ferrari. En esta ocasión, Vettel se tiene que conformar con el segundo puesto.

Los Mercedes no pudieron hacer trabajar a los neumáticos superblandos y ultrablandos y sus tiempos fueron mediocres.

Debido a su especial configuración con curvas cerradas y rectas cortas, lo que prima en él es la habilidad de los pilotos frente a la potencia de los motores.