La prueba con la que finaliza la tamporada de motorsport está siendo una clásica para el piloto italiano. Ya venció en Monza cuatro veces y este año marca la quinta en su palmarés.
Parecía que en esta ocasión lo iba a tener más difícil ya que tenía enfrente a Dani Sordo, que estrenaba el Hyundai WRC con el que competirá el próximo año, pero no ha sido así. Pero Valentino no ha dado opción.
Según Dani, los neumáticos han tenido mucho que ver. El montaba Michelin y Rossi Pirelli. Según el español, los suyosse degradaron mucho y los del italiano aguantaron mucho mejor en el esfalto. También hay que contar con la penalización que sufrió Sordo de 5 segundos en la primera etapa. Tercero fue el expiloto de Audi en las 24 Horas de Le Mans.