WRC

Terminó la penúltima etapa con una ventaja de 21,5 segundos sobre su compañero de equipo en el Hyundai i20, Dani Sordo. El líder del campeonato, Tänak, se encuentra a sólo 3,1 segundos de distancia después de haber superado al i20 de Sébastien Loeb por 0,6 segundos en el tramo final.

Dani Sordo comenzó el bucle de la tarde como acabó la mañana: dominando el primer corto tramo con una buena ventaja. En el segundo tuvo que doblar la rodilla ante Sebastien Loeb que en la última parte demostró por qué es multicampeón del Mundo.

El británico, al volante de un Toyota Yaris, fue el más rápido por 0,3 segundos por delante de la estrella española Sordo en el tramo de Emprius de 2,00 km de superficie mixta.

Su quinta victoria en las últimas siete pruebas fue completada con el máximo de puntos de bonificación en el último tramo del Wolf Power Stage. Se asegurará la corona si gana la penúltima prueba en España a finales de este mes.

En la prueba del WRC más cercana a casa, el irlandés llevó a su Toyota Yaris en los resbaladizos 4,90 km del tramo de tierra de Gwydir a lograr el mejor tiempo, más de un segundo por delante de un grupo de cinco pilotos seprados por tan solo tres décimas.

Sebastien terminó 34.7 segundos por delante de Esapekka Lappi, líder durante mucha parte del rallye, consiguiendo su primera victoria desde marzo y subiendo al segundo puesto de la clasificación. El líder de la serie, Ott Tänak, se sitúa a 17 puntos, con un máximo de 90 todavía en juego en las tres últimas pruebas para acabar el campeonato.

Ogier y Lappi ganaron las seis especiales rocosas cerca de Marmaris con temperaturas cercanas a los 35°C. El francés es líder por un error de su compañero del Citroën C3 en la penúltima especial, cuando a Lappi se le caló el motor en una paella.

Lappi terminó una jornada larga y dura, en la que los elementos se lanzaron a todo lo que pudieron a los competidores, con una ventaja de 17,7 segundos sobre su compañero de equipo con el Citroën C3 y campeón del mundo, Ogier. Neuville estaba 0,7 segundos más atrás con su Hyundai i20.

El irlandés, que disputa por primera vez la prueba de Marmaris, fue el más rápido en las rota especial de 4,70 km de Asparan con su Toyota Yaris, a un segundo se clasificó Andreas Mikkelsen.

Sobrevivió a un susto a última hora y logró su cuarta victoria en cinco pruebas, lo que llevó a Toyota a su primer triplete en el podio desde 1993 y la primera en el WRC desde este rallye hace cuatro años.