Viendo las imágenes, desde luego es posible afirmar que, la seguridad del BMW M4 ha sido altamente eficaz. Se observa que el habitáculo interior no ha sufrido grandes desperfectos.
El siniestro ocurrió en la ciudad de Múnich, cuando el propietario del deportivo, de veinte años, conducía a gran velocidad. Al parecer, perdió el control del vehículo golpeándose contra una señal de tráfico y después empotrarse contra dos árboles cercanos a la calzada por la que circulaba.
El protagonista de esta historia resultó ileso y pudo salir del amasijo de hierros por su propio pie con algunas heridas leves, aunque posteriormente, fue trasladado al hospital más cercano para realizarle pruebas y descartar posibles lesiones internas.
El vehículo, como muestran las fotografías ha quedado casi inservible, pues ambos ejes están dañados, así como la parte frontal con múltiples desperfectos.