Todas las personas que han tenido la suerte de ponerse a los mandos del Porsche GT2 RS coinciden en que es la máquina definitiva para los circuitos.
Con un motor turboalimentado de 690 CV y tracción trasera, no parece el modelo ideal para meter sobre el frío hielo de Suiza.
Por ello, han decidido acompañarle con un extraño modelo de Porsche.
El Porsche 911 S fue lanzado en 1972 e incorporaba un motor de 190 CV. Su versión de rally, recibió numerosas mejoras para conseguir alcanzar los 290 CV.
Solo existen 21 unidades en el mundo por lo cual el piloto llevaría mucha presión encima.
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