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Deportivo de verdad

Alfa Romeo 4C Spider, un “mini Ferrari”
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Alfa Romeo 4C Spider, un “mini Ferrari”

240 caballos, motor central Turbo, una tonelada de peso y menos de 4 metros de longitud, es la carta de presentación de este deportivo descapotable de la firma italiana.

Por Tommy Díaz-Valdés
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jueves 26 de octubre de 2017, 13:46h

El 4C Spider no es un coche lógico, que tenga un buen confort en marcha, una buena insonorización interior, maletero y unos acabados de lujo... Sino todo lo contario, es un vehículo concebido para emocionar al conductor en cuanto a deportividad se refiere y hacerle creer que va montado sobre un auténtico coche de carreras y encima a cielo descubierto. Se puede pedir más.

El Spider es un modelo único con un diseño muy italiano que se muestra por sus cuatro costados. Los menos entendidos se creerán que vas montado en un modelo del "cabalino rampante", hasta que ven el logo en el capó que delata al Alfa. Es un modelo con el que no se pasa inadvertido.

La fibra de carbono se emplea en multitud de elementos, pero hay que hacer una mención especial al chasis, que pesa tan sólo 73 kg y, además, está hecho de una sola pieza en fibra de carbono. El peso del 4C Spider es sólo 45 kg superior al 4C de carrocería cerrada, cuyo peso es 995 kg.

Entrando en materia, nos encontramos con un coche muy pequeño con una longitud de menos de 4 metros. Las reacciones son muy directas y secas. Es una auténtica lapa, permitiendo una velocidad de paso por curva muy elevada, difícil de superar por vehículos deportivos de mayor potencia. Permite muy poco y, cuando se descoloca, es muy difícil de rectificar. Sacará los colores a las manos más expertas. Es de lo más radical en cuanto a conducción deportiva se refiere y existe en el mercado. Es un kart matriculable.

No es el más radical, ya que existe el KTM Xbow y ese sí que es el máximo exponente en cuanto a sensaciones deportivas que produce. Eso sí, con una climatología adversa te mojarás, ya que carece de techo, cosa que con el vehículo de nuestra prueba no ocurriría.

El propulsor que monta es un 4 cilindros Turbo de 1.750cc en disposición central (detrás de los asientos) de inyección directa, que desarrolla 240 CV de potencia. Se ha creado totalmente en aluminio y ofrece unas prestaciones con un par máximo de 350 Nm, que está disponible en un 80% a 1700 rpm. El Alfa Romeo 4C alcanza una velocidad máxima que sobrepasa los 250 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h de tan sólo 4,5 segundos.

El sonido que emite el motor no pasara inadvertido y el sonido del turbo al cortar hará que te creas que vas en un auténtico coche de rallyes. Eso sí con una posición mucha más baja.

El sonido que emite el motor no pasara inadvertido y el sonido del turbo al cortar hará que te creas que vas en un auténtico coche de rallyes. Eso sí con una posición mucha más baja. La altura al suelo es de 1,19cm

Además, el 4C Spider está equipado con un turbocompresor de nueva generación y un colector de escape con convertidor de impulsos. Esta tecnología maximiza el par a baja velocidad y ofrece más potencia en respuesta a la aceleración del conductor.

También, al igual que los coches de competición, incorpora un sistema de refrigeración automático que protege el turbocompresor. Al apagar el motor, normalmente se detendría la circulación del aceite, causando que se perdiese la capacidad de lubricación y que se dañase el motor. Con la bomba de retardo, el aceite sigue circulando a través del turbocompresor hasta que este se enfría.

El conductor podrá elegir entre tres modos de conducción mediante el selector Alfa D.N.A (Dynamic, Natural y All Weather) que permite adaptar el automóvil a las condiciones de la carretera y al estilo de conducción. Además, el exclusivo modo Race mejora la experiencia de conducción en los circuitos de carreras. Al seleccionar la posición Dynamic (que es la más radical) se desactivan el sistema de control de estabilidad y el ABS, dando al conductor el pleno control del automóvil sin ningún tipo de ayuda electrónica.

El cuadro de instrumentos digital con pantalla TFT se configura automáticamente para ofrecer la información relevante del modo Alfa D.N.A. que tengas definido.

La caja de cambios es Automática (TCT) de doble embrague de seis marchas con levas en el volante que ha sido especialmente calibrada para este modelo. Otro punto a mejorar, es el accionamiento del sistema de cambio. En lugar de una tradicional palanca, Alfa Romeo ha optado por una serie de botones que, hasta que nos acostumbremos, nos resultarán incómodos al cambiar entre R y D.

Como todo lo que corre tiene que frenar. Esto va a cargo de la firma Brembo. El sistema de frenos monta discos perforados de 305mm de diámetro autoventilados en la parte delantera y 292mm en la parte trasera. Permiten que el coche se detenga mientras avanza a 100 km/h en tan solo 36 metros. El único “pero” lo encontramos en un sistema de tracción adicional que incluye. Debido a la carencia de autoblocante, el sistema de frenos actúa para detener la rueda interior en curva y optimizar la trazada. Esto provoca que, tras unos minutos de conducción deportiva, empecemos a oler los frenos, aunque no les hayamos dado un uso intensivo.

En cuanto al interior, como bien hemos dicho antes no está concebido para el lujo y las buenas calidades. El confort en marcha se ha olvidado. Tiene un maltero muy pequeño en el que podremos meter una pequeña maleta o el techo de lona de acción manual. No dispone de climatizador, ni de huecos portaobjetos. Las llaves, carteras, teléfono habrá que dejarlos en el bolsillo. Solo tiene un hueco para dejar una botella de agua o una lata. Una radio Alpine muy antigua y de la rumorosidad interior en marcha mejor no hablar.

La entrada y salida al vehículo es bastante incómoda para personas altas, y más con la capota puesta. También tendremos que ir al gimnasio para mover el volante desde parado, ya que carece de dirección asistida. Hemos echado en falta un volante más deportivo y unos asientos con mayor sujeción lateral.

CONCLUSIÓN

Nos encontramos con un modelo en el que el lujo, el confort en marcha y la comodidad no dan cabida en este coche, pero si produce unas sensaciones dinámicas que muy pocos coches en el mercado harán sentir y transmitir al conductor esa deportividad. Con el 4C Spider no se pasa inadvertido y romperá algún que otro cuello en los semáforos.

Es un capricho muy caro, con un precio que parte desde los 79.550 euros, pero ya se sabe, las sensaciones dinámicas y la exclusividad se paga. Existen vehículos más cómodos, como el Porsche 718 o un Audi TT, pero no transmiten el dinamismo y la deportividad del modelo de la marca italiana. Su rival directo es el Lotus Elise S, que desarrolla 20 caballos menos que el modelo de nuestra prueba.

RIVALES ALFA ROMEO 4C SPIDER


FICHA TECNICA

Cilindrada 1.742 cm³
Bloque motor 4 cilindros en línea turbo
Potencia (CV @ rpm) 240 @ 6.000
Par motor (Nm @ rpm) 350 Nm @ 2.200 - 4.250
Masa en vacío 1040 kg
Velocidad máxima 257 km/h
Aceleración 0-100 km/h 4,5 segundos
Transmisión TCT (TWIN-CLUTCH TRANSMISSION) de 6 velocidades
Tipo de tracción Trasera
Combustible Gasolina
Capacidad del depósito 40 litros
Consumo urbano 10,1 l/100 km
Consumo extraurbano 5,1 l/100 km
Consumo combinado 6,9 l/100 km
Capacidad maletero 105 litros
Precio 79.550 euros

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