Ferrari ha creado el SP-8, un superdeportivo exclusivo para unos pocos clientes selectos. Aunque mecánicamente es idéntico al F8, se diferencia por su apariencia exterior remodelada con piezas de carbono y una combinación de colores de dos tonos. El diseño incluye elementos de otros modelos de Ferrari y el interior combina lo nuevo y lo antiguo.
Para adquirir un superdeportivo nuevo fabricado por Ferrari, es imprescindible contar con una gran fortuna. Sin embargo, para que Ferrari fabrique un automóvil exclusivamente para ti, necesitas poseer una riqueza en un nivel completamente distinto. Esto es precisamente lo que Maranello realiza anualmente para unos pocos clientes selectos, y su más reciente creación es el SP-8.
La división responsable de estos singulares es 'SP', que significa 'Proyectos Especiales'. Además, la referencia '8' hace alusión al ya desaparecido F8 Spider, la última versión del coche que comenzó su vida como el 458. Mecánicamente, el SP-8 es idéntico a un F8, ya que el equipo SP no se involucra con los componentes internos. Por lo tanto, cuenta con un V8 biturbo de 3.9 litros que produce 720 CV. Sin embargo, la diferencia radica en su apariencia exterior.
A través de piezas de carbono, se logra una diferencia en la remodelación sutil de la carrocería del F8. Además, se engaña a los ojos con una inteligente combinación de colores de dos tonos, lo que hace que parezca una remodelación aún más radical. Mientras que la sección delantera tiene un acabado de carbono visible que da la impresión de estar intentando comerse al resto del coche, la zaga está pintada de plata.
La parrilla de aluminio fundido en el frontal es fabricada a partir de un solo molde impreso en 3D. Los radios verticales son espaciados y angulados según la opinión del equipo de diseño y los datos de flujo del departamento de aerodinámica. Además, se han incorporado cubiertas de faros especiales y las ruedas están inspiradas en el aspecto de las llantas utilizadas en el mítico F40.
Haciendo referencia a los coches más modernos, el diseño en la parte trasera presenta las salidas de escape cuadradas del 296 GTB y luces traseras tomadas del Roma, pero con opticas únicas. En cuanto al interior, se mezcla lo nuevo y lo antiguo, ya que se conserva la arquitectura básica del tablero del F8, pero el selector de marchas para la transmisión F1 adopta la puerta de estilo retro introducida por primera vez en el SF90 Stradale.
Esperemos que haga buen tiempo en Taiwán, ya que el propietario que lo puso en marcha parece ser de allí y el SP-8 no tiene techo. Sin embargo, si puedes permitirte los 2 millones de dólares rumoreados para aparecer en la lista de tarjetas navideñas de Proyectos Especiales de Ferrari, es probable que tengas otros autos para usar cuando llueva.
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