Bugatti presenta el Brouillard, un exclusivo vehículo que rinde homenaje al caballo favorito de Ettore Bugatti, utilizando el motor W16 de 1578 caballos. Este modelo marca el inicio del Programa Solitaire, que ofrecerá personalización extrema. Su diseño combina ingeniería tradicional y artesanía personalizada, destacando por su estética única y detalles ecuestres.
Bugatti podría haber comenzado una nueva fase con su Tourbillon híbrido, sin embargo, todavía no ha llegado el momento de concluir la icónica evolución de su motor W16. La más reciente obra maestra del fabricante, conocida como Brouillard, se mueve gracias al mismo motor W16 de 8.0 litros y cuatro turbocompresores que caracterizó al ya descontinuado Chiron.
La primera construcción de la nueva serie de carrocerías Solitaire de Bugatti es esta creación excepcional, que además rinde homenaje al caballo preferido de Ettore Bugatti. Durante la Semana del Automóvil de Monterey, en California, se llevará a cabo su presentación pública, y posteriormente se lanzarán otros modelos únicos de Bugatti.
Por otro lado, el Brouillard, una asombrosa fusión de ingeniería tradicional y artesanía personalizada, ha sido encargado por el empresario holandés Michel Perridon, quien posee la colección privada más extensa de Bugatti en el mundo, así como los muebles de Carlo Bugatti y las esculturas de Rembrandt Bugatti. Aunque a simple vista podría parecer una versión cupé del W16 Mistral de edición limitada, un análisis más minucioso revela que casi cada panel ha sido diseñado a medida.
En la parte delantera, el Brouillard se destaca por un parachoques esculpido que incorpora una amplia parrilla con forma de herradura, así como faros LED que están montados en los guardabarros y cuentan con entradas de aire adicionales. El perfil del vehículo exhibe las distintivas aberturas en forma de C situadas detrás del habitáculo, junto a grandes piezas de fibra de carbono que crean un contraste impresionante con el vibrante tono verde.
También, los guardabarros traseros se expanden de manera agresiva, dando lugar a una plataforma trasera personalizada que presenta una entrada de aire en el techo. En la parte posterior, un alerón trasero integrado se fusiona perfectamente con el diseño de la cola, lo que no solo mejora la carga aerodinámica, sino que también realza el impacto visual. Las luces traseras LED con forma de X parecen tener su origen en el W16 Mistral, aunque las cuatro salidas de escape del difusor trasero son más parecidas a las del Chiron Super Sport.
En cuanto al interior, la cabina mantiene la distribución general del Chiron, aunque casi todos sus componentes han sido adaptados a medida. La paleta de colores que destaca es el verde, con telas a cuadros escoceses de París confeccionadas específicamente, fibra de carbono teñida en ese mismo tono y una mezcla de acabados en cuero y aluminio mecanizado.
Igualmente,el Brouillard es sin duda singular, pero representa apenas el inicio del nuevo Programa Solitario. Este programa eleva la personalización a un nivel superior en comparación con el actual programa Bugatti Sur Mesure, diseñando modelos exclusivos para aquellos afortunados que cuentan con un presupuesto limitado.
Asimismo,el Brouillard utiliza un chasis que combina fibra de carbono y aluminio, el cual pertenece a la familia Chiron. Este mismo chasis también es utilizado por otros modelos como el Divo, La Voiture Noire, Centodieci, W16 Mistral y el exclusivo para circuito, Bolide. Por supuesto, este vehículo cuenta con la versión más potente del motor W16 de 8.0 litros, equipado con cuatro turbocompresores, capaz de generar una impresionante potencia de 1578 caballos (1177 kW o 1600 CV).
Un aspecto a destacar es la escultura artesanal del caballo Brouillard, que se encuentra en un inserto de cristal ubicado en la palanca de cambios de aluminio. Además, los paneles de las puertas y los respaldos de los asientos presentan bordados con motivos equinos, lo que enfatiza el nombre ecuestre del vehículo.
La marca declaró que se generarán hasta dos obras maestras anualmente a través del programa, asegurando que cada modelo obtenga la dedicación y el arte que le corresponde. Manteniendo la tradición de la marca en la fabricación de carrocerías, estas piezas exclusivas emplearán los sistemas de propulsión y chasis ya existentes de Bugatti. Además, las opciones se ven efectivamente limitadas a hipercoches que se basan en el Chiron o el Tourbillon, ofreciendo diseños exteriores e interiores personalizados.