El deportivo reemplaza su V8 atmosférico por un motor 2.9 TFSI V6 biturbo de 450CV y 600Nm con el que acelera de 0 a 100 en 3,9 segundos y alcanza los 280 km/h.
A simple vista, el coupé presenta entradas de aire con una estructura de nido de abeja, pero no serán las unicas entradas que se vean en el frontal: en el exterior de los faros también se aprecian unas adicionales. La parrilla es más ancha que la de su antecesor, los pasos de rueda son 15 milímetros más amplios y como opción se podrán elegir faros Matrix LED.
En una segunda mirada más detenida podemos ver los detalles RS. Éstos quedarían reflejados en el alerón de labio trasero, los tubos de escape ovales o el difusor. De serie aparecerá con unas llantas de 19", aunque en opción estarán disponibles las de 20". Las variantes de personalización quedan nuevamente definidas con los paquetes: negro brillante, aluminio mate y carbono.
La carrocería de 4.723 milímetros (74 más que el modelo anterior) esconde un interior tanto o más deportivo que el exterior.
Detalles como los asientos RS tapizados en cuero Fine Nappa con costuras de trama de diamante y el volante multifunción RS con la parte inferior achatada resaltan claramente que no estamos ante un Audi A5 cualquiera. Los logos RS aparecen, además de en los asientos y el volante, en los umbrales de las puertas y en el selector del cambio.
Una función especifica en el tablero digital Audi virtual cockpit proporciona información sobre la presión de los neumáticos, el par motor y las fuerzas G. De igual modo, una luz de cambio le indica al conductor que cambie de marcha al alcanzar el límite de revoluciones.
No obstante, lo que realmente importa se esconde bajo el capó. Y es que Audi ha decidido mantener la apuesta de bajar las tallas, abandonando el motor V8 atmosférico a favor de un 2.9 TFSI V6 biturbo menos gastón y más eficiente (homologa 8,7 l/100 km). Además, esta reducción del número de cilindros no penaliza su carácter, puesto que mantiene sus 450 CV y además incrementa su par motor hasta los 600 Nm. Esto, junto a la transmisión Tiptronic de ocho velocidades y a la tracción integral quattro, le permite pasar de 0 a 100 en 3,9 segundos y alcanzar los 250 km/h de velocidad máxima limitada (280 km/h con el paquete Dynamic).
Y todo ello con una eficiencia impensable en un coche de estas características, ya que se conforma con 8,7 litros de combustible para recorrer 100 kilómetros en ciclo mixto, que corresponden a unas emisiones de 197 gramos de CO2 por kilómetro. Esto supone un 17% más de eficiencia que su predecesor.
Su llegada al mercado español es inmediata y en la web oficial de la marca ya está disponible el configurador del Audi RS5 2017 que, con un precio base de 99.360 euros, tiene tantos elementos personalizables que te será difícil rebajar la factura de los 120.000 euros. Además de poder elegir entre su exquisita paleta de pinturas Exclusive, podrás equipar el RS5 con distintos tipos de llantas, tapicerías, equipo de sonido firmado por Bang & Olufsen... además, claro está, de unas cuantas golosinas orientadas a mejorar la experiencia de conducción. Como sus escapes RS, el diferencial trasero deportivo, los frenos cerámicos o el tren de rodaje más salvaje disponible.
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